Arantxa Sánchez Vicario asegura que intentó pagar su deuda y que su exmarido se opuso

Arantxa Sánchez Vicario asegura que intentó pagar su deuda y que su exmarido se opuso

La extenista Arantxa Sánchez Vicario ha comparecido en el juicio en Barcelona en el que se le acusa de urdir un plan junto a su entonces marido, Josep Santacana, para evitar el pago de una deuda al Banco de Luxemburgo. Durante su declaración, Sánchez Vicario ha afirmado que ella pretendía saldar esa deuda, pero que su exmarido se opuso y le dijo que él «se encargaba de todo».

El Ministerio Público pide para Sánchez Vicario y Santacana cuatro años de cárcel por supuestamente descapitalizar su patrimonio y evitar el pago de la deuda al Banco de Luxemburgo. La Fiscalía les acusa de un delito de alzamiento de bienes o de insolvencia punibles y solicita que paguen una multa de 12 euros diarios durante 24 meses, lo que equivale a un total de 8.640 euros.

Según la versión del Ministerio Público, Sánchez Vicario ideó un plan para descapitalizar su patrimonio con la ayuda de su exmarido y otros cinco acusados, con el objetivo de frustrar el cobro de la deuda por parte del banco. La extenista ha insistido en que estaba dispuesta a abonar el descubierto, pero su exmarido le impidió hacerlo y le aseguró que él se encargaría de todo.

Sánchez Vicario ha afirmado que ha demandado a Santacana en Estados Unidos para intentar localizar su dinero, después de que éste supuestamente vendiera todo el patrimonio que ella había acumulado durante su carrera y moviera el liquido obtenido a ese país. La acusada ha recordado que destina el 50% de sus ingresos al pago de la deuda y que ya ha abonado cerca de 1,9 millones.

El abogado de Santacana ha calificado de «increíble» la declaración de Sánchez Vicario y ha presentado cartas manuscritas supuestamente escritas por ella en las que le agradece todo y le pide que vuelvan juntos. Además, ha puesto en duda la versión de la extenista y ha resaltado que «la única prueba de cargo que nos encontramos es la declaración de Arantxa».

Fuentes: El País.